Gaby Soruco de Parada
Buenas noches,
A las Dignas Autoridades y a
los Señores y Señoras presentes.
En representación y en nombre de cada una de las
mujeres, a quienes nos ha tocado dirigir como Presidentas, ésta hermosa e
histórica institución, como lo es el glorioso COMITÉ CÍVICO FEMENINO DE SANTA
CRUZ; deseo expresar un sincero y emotivo agradecimiento a la presente gestión
a la cabeza de Mary Olivia Vincenti de Mansilla y a las dignas mujeres que la
acompañan… por los homenajes que han
venido realizando en conmemoración del civismo femenino, como ha sido: rescatar
para la memoria cruceña la trayectoria de nuestra líder Elffy Albrecht Ibáñez (bastión
del civismo cruceño y promotora de la democracia boliviana); el acierto de
destacar y dar a conocer a las generaciones presentes la trayectoria de cada
una de las EX PRESIDENTAS DEL COMITÉ CÍVICO FEMENINO DE SANTA CRUZ (sus luchas,
sus nobles causas para el bien del pueblo cruceño, la permanente defensa de la
mujer)… reflejadas en cada gestión cívica desde la fundación de nuestra
institución, un día como hoy del año de 1957.
El movimiento
cívico femenino estuvo conformado por madres de familia, madres cabezas de
hogar, profesoras, enfermeras, estudiantes, entre otras, sin distinción de
edades ni de clases. Ese momento auténtico, cambió y encauzó hacia el progreso
democrático y económico-social, el rumbo de la historia de Santa Cruz.
Es preciso
destacar que los grandes líderes cívicos, eran hombres con amplias convicciones
de igualdad y equidad, que dieron un lugar y un merecido reconocimiento a las
mujeres de su pueblo, con una significativa interacción que, determinó el
carácter simbólico de las acciones del movimiento cívico cruceño.
Ayudar y solidarizar, son verbos que se conjugan con fuerza en instituciones como la nuestra, dedicadas alma y vida al voluntariado, al servicio por el bien de los demás de forma desinteresada, en beneficio de nuestro Departamento. Razón vocacional que debe ser permanentemente valorada de manera significativa, como lo es en este momento.
Pues, resulta de suma importancia para Santa Cruz y el
país, que se respete – en serio - la institucionalidad, a partir del respeto a
sus orígenes, a su propia historia, a su naturaleza por la cual y para la cual
fueron creadas: el voluntariado y la búsqueda de más democracia, con respeto,
con dignidad, sin abusos, sin autoritarismos ni resentimientos -.
Señores y señoras, distinguidas autoridades, esto que
digo, tengan la seguridad que lo expreso con un profundo amor e inquebrantable
adhesión al espíritu democrático.
Finalizo estas palabras, renovando nuestra muestra de
gratitud por el homenaje que hoy se celebra y los que se han venido ofreciendo,
por ello, expresamos nuestra felicidad compartida por el merecido
reconocimiento a otra, de nuestras mujeres líderes cívicas, como lo es la Sra.
Nancy Bruno de Velasco, mujer valiente y generosa.
¡Muchas Gracias!
